En el caso de la médico pediatra
Yanet María Chirinos, su hija nació con síndrome de klipper trenaunay, uno de los casos que sucede
a uno en un millón.
Es un síndrome muy complicado, tenía
que apoyarse para caminar, para subir a escaleras tenía que subirla en brazos, “imagina
tener que cargar a tu hija a los 9 años de edad y eso que desde bebe fue muy
grande”, además su columna tiene una malformación severa que no puede operarse,
explica la madre.
Tras buscar alternativas para su
hija, Chirino encontró en internet información sobre equino terapia, la llevo y
aunque Johana, su hija , tardo en subir al caballo, debido a sus mismos
problemas, cuando inicio la terapia con el animal, los cambios favorables no se
hicieron esperar, en principio algunos detalles de su evolución pasaron desapercibidos,
pero luego la diferencia fue tremenda, “ella babeaba constantemente y tras 15 días
de terapia note ya no estaba usando el pañito que antes empleaba para limpiar
su boca”.
Al mes ella comenzó a subir sola
una escalera, yo me senté a llorar de la emoción tanto tiempo y gastos en fisioterapeutas y especialistas y no habíamos logrado eso.
Desde ese entonces siguieron
asistiendo, Johana continúa con su malformación
pero aprendió a hablar a sociabilizar y mejoro su calidad de vida, gracias a los caballos.
Chirinos se ofreció como
voluntaria, en el centro de Valencia, en el que conoció al médico veterinario Leonardo Donders, su actual compañero
en lo personal y laboral, pues además de ser su esposo hoy día trabajan juntos
en la fundación de equino terapia María Rivero, que funciona en el Estado Lara.
Caballos medicinales:
Según Chirinos, el equino
transmite al paciente tres características esenciales: Impulso rítmico, calor
corporal y su cadencia.
Cuando camina, mueve la cadera
igual que el humano, lo cual permite equilibrar los movimientos del paciente y
el terapeuta arriba del animal, el caballo es el único animal que mueve su
pelvis como el humano, eso hace que el paciente virtualmente haga los
movimientos de la marcha natural humana, además el que está arriba no solo
utiliza el caballo como herramienta, sino que sabe lo que está haciendo con el
paciente, no es lo mismo trabajar con mi hija, con su condición particular, que
efectuarlo con un autista o con otra patología o un paralitico, también depende
de la edad y la parte afectada, pues en todas las patologías hay diversos tipos
de afección, afirma la Dra. Chirinos.
Es por esta razón que la persona
que imparte la terapia debe ser, preferiblemente, un médico o un jinete con asesoría
de un medico.
En caso de trastornos de conducta,
o de déficit de atención también esta terapia ayuda al paciente, por ejemplo el
autista que no sociabiliza, no tiene contacto con personas o medios ambientales
desconocidos, tiene problemas sensoriales múltiples, híper o hipo sensibilidad, incoordinación
motoras entre otras, se le indican ejercicios que mejoran todo el
contenido a su alrededor, que no esté
tolerando, explica Chirinos.
Eso sí, lleva tiempo, no es que
llegaste y lo montaste en el caballo, pero lo que sí es cierto es que cuando
salen de aquí, las madres te refieren que ya toleran mejor los cambios, tienen mejor atención ,
toleran los ruidos, que los toquen y el
paciente a parte de todo, no está consciente de que está haciendo terapia, el
viene feliz porque entiende que cree va a divertirse con sus amigos montando a
caballo, eso pasa con todos, no solo con el autista, ejemplifico con el autista
por ser el más fuerte de los trastornos de conducta, agrega.
El centro que comenzó en
Valencia, estado Carabobo, abrió posteriormente una sede en san Antonio de los
Altos, la cual cerró sus puertas para mudarse al estado Lara, donde brindan
tratamiento a pacientes con parálisis cerebral, autismo, síndrome de Down,
retardo psicomotor, alteraciones de conducta, hiperactividad, entre otras.
Hoy da además de atender
pacientes del estado Lara, recibe, pacientes de varios estados, como Yaracuy,
Portuguesa, Mérida, Trujillo y Zulia, entre otros, ya reciben llamadas de otros
países, como Cuba, Republica Dominicana
y Colombia, comenta Chirinos.
El numero de cesiones ideal para
una recuperación, es de dos terapias semanales, sin embargo en algunos casos
por la distancia entre su sede actual y la residencia del paciente, existen
algunos que acuden quincenalmente, claro los resultados no son tan rápidos,
como los de un paciente que viene dos
veces por semana, pero igual se observa mejoría en sus condiciones.
Esta fundación se sustenta con la
cuota que cancelan los padres de pacientes, la cual tiene un costo actual de
Bs.120 de Lunes a Viernes y Bs.170 los días sábados.
Por lo que es mucho lo que esta
pareja, que con su experiencia propia aporta a la comunidad, ofreciendo un
excelente servicio para mejorar las condiciones de vida de los pacientes que al
centro acuden y que en muchas ocasiones ofrecen tarifas más bajas para quienes
no disponen de las condiciones económicas como para cubrir el costo actual de
las terapias.
Es por ello que el aporte de
Empresas Privadas o de particulares, contribuirían en esta loable misión que
deja ver la calidad humana y social de estos dos padres y profesionales, en pro
de sus pacientes.
Para contactarles y contribuir de
alguna manera puede hacerlo a través del correo electrónico equinoterapialara@gmail.com o a través del teléfono 0424-4014203
